Significado de la palabra sacristan

Los significados de las palabras han sido elaborados de acuerdo con los intereses lúdicos de nuestros crucigramas. No tienen un carácter académico estricto.

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¿Qué es sacristan?

Persona que en las iglesias tiene a su cargo ayudar al sacerdote en el servicio del altar y cuidar de los ornamentos y de la limpieza y aseo de la iglesia y sacristía. | 3. m. tontillo ( faldellín con aros para ahuecar las faldas).

Tipo: Sustantivo común

Etimología

Proviene de "sacrista", que significa "el que cuida los sagrarios", es decir, los recipientes donde se aloja el Sacramento Eucaristía. En la época medieval, el sacristán era el encargado de custodiar y mantener limpio el sagrario, así como también de atender las necesidades ilimitadas de la iglesia, como la custodia de la sagrada Biblia, el altar, y los ornamentos litúrgicos. A lo largo del tiempo, el término "sacristán" paso a referirse al miembro del clero que se encargaba de realizar los oficios y cérbero en la catedral o iglesia parroquial, y que se dedicaban a la preparación y administración de los sacramentos. En español, la palabra "sacristán" se documenta por primera vez en el siglo XIII y se utiliza todavía hoy en día para referirse al miembro del clero que se encarga de las responsabilidades mencionadas anteriormente.

Libros donde se menciona la palabra sacristan

Borís Godunov

Aleksandr Pushkin

rancés) << Desconocido 14 ¡Muy bien! ¡Alto! ¡En marcha! (Alemán) << Desconocido 15 ¡Que Dios nos ayude! (Alemán) << SACRISTAN

Los Ayacuchos

Benito Pérez Galdós

Humilladero, por no abandonar una pista que segura me parecía, y que al fin resultó más falsa que Judas. Donde creí encontrar a Santiago, topé con un sacristán loco que compone imágenes de santos, poniéndoles cabezas de chisperos y atributos de tauromaquia. De allí (calle de Luciente, 3) me vine a casa, donde

El señor de Bembibre

Enrique Gil y Carrasco

antes a la de nuestro caballero. Por fin, después de acabados los oficios, la iglesia se fue desocupando, las monjas rezaron sus últimas oraciones, el sacristán apagó las luces y salió de la iglesia cerrando las puertas con sus enormes llaves. Quedóse el templo en un silencio sepulcral y alumbrado por una sol